Una de las cosas que menos esperaba al decidir moverme primordialmente en bicicleta por la ciudad, fue oler mariguana más seguido que antes. Es decir, no hay duda que desde que un primo me dijo en un concierto -cuando tenía 14 años- que ese olor era mariguana, lo he olido en partidos de futbol, conciertos, fiestas, y algunos bares. Ahora, puedo decir que más que en lugares privados, huelo mariguana en la calle. Veo a veces a gente sola, y acompañada, caminando por la banqueta, discretamente apretando el índice y el pulgar como si quisieran con los dedos aplastar una luciérnaga.
Huelo mariguana y pienso en la gente que tiene cáncer y podría paliar las náuseas que provoca la quimioterapia con tan sencilla y natural droga. También pienso en gente con todo tipo de enfermedades crónicas para las cuales la mariguana podría ser un complemento a las medicinas caras y con efectividad variante que requiere su tratamiento.
Huelo mariguana y pienso en cómo funcionan los distintos mercados ilegales de drogas en la ciudad. Pienso en los jóvenes que veo en una que otra esquina, sólo en ciertas colonias, parados con un bolso colgado del cuerpo, un celular en la mano y una pequeña motocicleta a unos metros. Los veo cotorreando con sus compañeros, algunos con aretes con diamantes falsos en la oreja; con gorras volteadas con la visera plana; con un par de cadenas al cuello. Sí sí, ese mercado con esos participantes que son sujetos de prejuicios a partir de cómo se visten y se comportan. Sí sí, el de los que sufren los prejuicios de quien no los conoce. Los prejuicios de quien esto escribe.
Aquí el artículo de RAND sobre las ganancias de los carteles mexicanos.
Acá la encuesta de "Delincuencia, marginalidad y desempeño institucional" del CIDE, a cargo de Azaola y Bergman.
Aquí los datos de detenciones de 2008 de la SSP-DF
Abajo un video de una discusión en la que participé en Al-Jazeera. Lo verdad no lo hice nada bien. En mi defensa, estaba parado en una azotea con un foco blanco en la cara, y sin poder oir muy bien a los otros participantes. Aún así espero por lo menos se medio hayan entendido algunos de mis argumentos sobre la legalización.
Cuando comencé a leer el artículo tuve la sensación de que te ibas a extralimitar, sin embargo me parece que defendiste tu punto manteniéndote en el límite de la sensatez. A juicio personal, creo que es así como se discute un tema, especialmente uno tan controvertido.
Mi opinión (hasta ahora) se encuentra del otro lado de la mesa de debate pero tus argumentos me dejan algo en qué pensar.
Publicado por: Elena | 03/09/11 en 4:06
Me parece que tu participación estuvo muy bien y todo el programa en general. Especialmente cuando se pone en contexto que el problema es del tamaño de un mercado de millones de consumidores en los Estados Unidos. Por cierto me pareció excelente un artículo que también fue publicado en Nexos sobre el problema de la legalización de las drogas, es sorprendente que el mayor mercado es de Marihuana y no de otro tipo de drogas como la cocaína.
Publicado por: Alejandra Santoyo | 05/09/11 en 23:05